torta de brownie y relleno de chocolate chip cookie

Hace mucho, mucho, muchísimo que veo por todos lados masa para galletitas de chips, pero usada para otras cosas, y siempre crudas...

Todavía me pregunto (ya no porque la hice y la use 😄) que hacemos con la harina cruda, sin cocinar... donde dejamos esa cuestión de cocinar la crema pastelera o la salsa blanca x minutos (según la abuela en cuestión, la cantidad de minutos requeridos) para que se vaya el gusto a la harina y la misma se cocine...

Pues bien, parece que al final no es para tanto. Se puede hacer y comer sin gusto a harina.
En este caso, la masa sin cocción para chocolate chips cookies está pensada para relleno. Y que relleno! Una combinación con un clásico brownie que es una bomba!

Eso sí, es para compartir entre muchos! O no, aunque después no vale quejarse de dolor de panza!

Hay una receta!

masitas de limón | fáciles y ricas

Tengo limones mutantes para rato.
Además de que son muchos, cada uno es como 2 (o más) limones comunes. Con un limón tengo para una receta o más!

Así que volví a hacer unas clásicas, ricas, mantecosas, y super preferidas: galletitas de limón. No podría haber nada más rico.

Esta receta es de Jamie Oliver, pero la masa me quedo tan tierna, que opté por hacer la técnica chorizo/tajada para formarlas, en lugar de estirar y cortar.

Ideales para hacer en una tarde de lluvia.
Ya tengo ganas de hacerlas otra vez!

Hay una receta!

sablés ispahan | sutiles y delicadas

Parece que Ispahan es famoso por sus rosas. Hay un tipo de rosa de muchos pétalos (una rosa clavel?), que se llama técnicamente rosa Ispahan.
Cruzarse con recetas originales no solo te hacen hacer meriendas deliciosas, también conocer un poco más del mundo.

Parece también que es la cuidad más cristiana de Irán, y la capital cultural. Y que Pierre Hermé se copó con sus aromas y sabores, y se puso a elaborar un montón de recetas occidentales con sus combinaciones. Uno de sus macarons más famosos son el Ispahan: con rosas y frambuesas.

Y también creo algo más simple. Tan simple como galletitas de manteca. Las clásicas sablé pero con la combinación de su obsesión: rosas y frambuesas.
Dorie Greenspan publicó su versión de este clásico del francés en el New York Times.
Y yo publico mi versión de su versión acá.

Unas masitas sablés perfumadas con agua de rosas, "granizadas" con cranberries secos y decoradas con azúcar rosada. Una monada.

Hay una receta!

budín de limón y mascarpone | super húmedo

Este clima tan indeciso tiene media ciudad florecida. Los árboles apenas se pelaron los pocos días de frío, y casi que no hubo hojas de otoño.

Un poco más temprano que de costumbre, empezó a haber limones (los de verdad, los que me gustan para dulces), por demás.
Limones a montones y terriblemente grandes. Y perfumados, y bien ácidos y alimonados.

Así que, antes de freezarlos, voy a intentar aprovecharlos.

Por ahora, entre bártulos en cajas y moldes vaya a saber donde, salió esté budín húmedo a más no poder, un poco tostado de más, pero no por eso menos delicioso!

Hay una receta!

blondies que parecen brownies | para engañar a los chocoholic

Para no perder la práctica quería, aunque sea, hacer algo fácil y rápido para merendar.
La verdad es que tengo media cocina embalada, incluidos los ingredientes.

así que después de una rápida inspección ocular de qué había amano, me decidí por estos blondies one bowl (siii! palabra mágica!!!) de Handle the Heat.
En la inspección se me pasó por alto que el azúcar era negro, no rubio. Tenía rubio pero de una tanda que no me gustó para cocinar (muy gruesa). Así que la única opción (en piyama) era hacerlos con ese azúcar cuasi caramelozo y oscuro.

Se podría engañar a cualquier amante del chocolate con estos blondies. Por lo menos a simple vista.
Porque una vez que los probas, te das cuenta que el único chocolate que tiene son los gigantes trozos que aparecen cada tanto. Pero la masa en sí es caramelo. Caramelo oscuro, casi al límite de caramelo quemado, pero ese segundo antes que lo hace delicioso.

La próxima los hago con el azúcar que corresponde. Seguramente sean mucho menos intensos y acaramelados que estos, pero igual de ricos!

Hay una receta!