En cualquier restaurante de comida china en Estados Unidos las sirven. Sea un bolichito "para llevar", o un lugar de verdad, donde te quedes a comer, la cuenta siempre llega con ellas.
Como acá solo las vemos en el cine, decidí hacerlas en casa.
Es muy parecida a la clásica masa de tuile, pero con una vuelta en la forma, que no les voy a mentir, no es nada fácil... La masa es riquísima, así que con hacer empanaditas con un mensaje adentro, yo me daría más que satisfecha la próxima vez.
Es una opción ideal y diferente para las Fiestas que se aproximan: dejar dentro de cada galletita un lindo mensaje de Navidad/Fin de Año para quienes nos acompañen en la cena de esa noche, no?
Esta vez no fue el caso. Decidí poner fortunas bien ridículas y divertidas, para una merienda de un día cualquiera. Por ejemplo: Tendrás hambre otra vez en una hora. 😄