Más recuerdos: quiero esta bandeja desde que tengo memoria. Contuvo durante años las facturas de largos domingos de mate en lo de mi abuela. Ahora, sin facturas y sin domingos de mate, es mía. |
Para mí, el restaurante griego por excelencia es Greek Island Taverna, un lugar al que solíamos ir cuando frecuentábamos las playas de Fort Lauderdale.
Aproveche para estrenar uno de los tantos regalos de Pollen Design: el pelapapa y cuchillo Prepara. |
Y de ese lugar recuerdo un plato exquisito, que después de mucho googlear y combinar recetas, creo que me salió tal cual lo recuerdo... o quizás no, pero estaba tan rico que creo que va a ser una receta a adoptar.
Armada de la receta, busqué los mejores ingredientes que podía conseguir cerca de casa. Al ser tan pocos y tan básicos, lo importante era conseguir buen sabor con buenos productos. Así que fui a visitar a las chicas de Kler, especias y condimentos. Allí compré sal marina, orégano y aceite de oliva.
El pollo lo compré en lo de mi amigo de la Granja San Benito, pollos orgánicos. Más de 40 años en el barrio.
Papas y limón, en la verdulería de enfrente.