Cuando primero leí la peli que propusieron las chicas pensé: este mes no participo. Hook no me dijo nunca nada, será que la agarre de grande, y que además, Robin Williams después de La Sociedad de los Poetas Muertos y Pescador de ilusiones me resultó un bobo total. Pero en el fondo la receta no tenía que ver con la película, si no con una receta que nos transportara a la infancia.
Y buscando entre papeles, papelitos y papeluchos para encontrar la receta de negritos para Blanca Cotta, encontré una anotación de hace mil años. Una receta que me costó, tuve que prácticamente suplicarla. Una receta top secret, pero que nunca falta en las reuniones familiares. Kilos y más kilos de rosquitas (ahora que las hice entiendo porque siempre las bandejas son tan abundantes!).
Creo que igual, el día que conseguí que me pasaran la receta, me ocultaron información. Como antes las recetas de todos los días se hacían "a ojo", las tías nunca tuvieron las cantidades exactas... y en el papelito en cuestión definitivamente no están exactas... Llegué a la conclusión de que: a) realmente la hacen a ojo o b) en donde anoté taza debería haber anotado pocillo, me acuerdo que mi abuela tenía muchas recetas "a ojo" (la pizza entre ellas) con pocillo como medida y no taza de 250cc.
Salen las dos latas llenas que ven acá, y dos latas más! Pero decidí dejar la masa en la heladera y seguir otro día! |
Por lo tanto, terminé haciendo la receta "a ojo" yo también, y salieron perfectas!
Apenas las puse en el horno, la cocina se perfumó con el aroma de los paquetes con que las tías llegan a la casa del abuelo... y una vez fuera del horno me dejaron bastante conforme.
Ahora me toca llevarle una bandeja a el abuelo y otra a las tías para que me den su veredicto!